Recomendaciones para Acompañar a un Niño con TDAH
El TDAH es un trastorno del neurodesarrollo que puede afectar la atención, la autorregulación y/o el nivel de actividad. Algunos niños son más distraídos, otros más impulsivos o inquietos, y muchos combinan estas características.
Con un entorno adaptado, contención emocional y estrategias adecuadas, los niños con TDAH pueden desarrollar su potencial, aprender con entusiasmo y mejorar su bienestar.
Recomendaciones para el día a día
- Evitar el uso de pantallas :
No importa el contenido las pantallas generan daños que sostenidos en el tiempo pueden tornarse irreversibles
- Estructurá su entorno con rutinas claras :
Anticipá lo que va a suceder, usá horarios visuales o listados simples. Los cambios inesperados pueden desorganizarlo.
- Dale indicaciones breves y concretas, de a una por vez :
Evitá sobrecargarlo con muchas consignas. Usá frases claras, con contacto visual y asegurate de que haya comprendido.
- Dividí las tareas largas en pasos cortos y alcanzables :
Los objetivos a corto plazo lo ayudan a enfocarse y sentirse motivado.
- Ofrecé un espacio libre de distracciones para tareas escolares :
Silencio, orden visual, pocos estímulos. A veces usar auriculares o separadores visuales puede ayudar.
- Permití movimiento entre actividades :
No lo obligues a quedarse quieto largos períodos. Breves pausas activas mejoran su concentración.
- Usá el refuerzo positivo :
Felicitá cada esfuerzo, no solo los resultados. Reforzá los comportamientos deseados con elogios, tiempo compartido o recompensas simples.
- Trabajá en conjunto con la escuela y terapeutas :
El seguimiento interdisciplinario mejora mucho el proceso de aprendizaje y adaptación social.
Un mensaje importante
Los niños con TDAH no son “malos” ni “desobedientes”: tienen una forma diferente de procesar la información y regularse. Lo que más necesitan es comprensión, estructura, límites claros y adultos que confíen en ellos.